Luego que Mercedes Aráoz renunció a la candidatura presidencial aprista y el descabezamiento de su fórmula, unida a denuncias de fraude y medidas de emergencia, que abrían en el partido una de sus más graves crisis políticas, el máximo líder de esa agrupación, el presidente Alan García, marcó fría distancia y salvó de responsabilidades al afirmar que nunca estuvo de acuerdo con el nombramiento de la ex ministra.
“Siempre les dije a los compañeros apristas que era favorable un candidato del partido (…) inclusive en la última reunión que tuvimos les dije que levante la mano el que tenga el coraje de ser candidato y nadie levantó la mano, después se pusieron de acuerdo en invitar a Mercedes”, sostuvo.
Atrás quedaron sus elogios a “su ministra estrella” o a la “candidata de polendas”.
Horas más tarde, en la noche, una reunión de emergencia del Comité Ejecutivo Nacional ratificó la propuesta que hizo la Comisión Política del partido y se anunció la renuncia de la fórmula presidencial en pleno, es decir, el primer vicepresidente Javier Velásquez Quesquén y la segunda vicepresidenta Nidia Vílchez.
En consecuencia, el Partido Aprista participará en las próximas elecciones solo con fórmula parlamentaria, la cual será reestructurada.
SE BUSCA NÚMERO 1
El acuerdo de las instancias partidarias fue que Jorge del Castillo asumirá el número 36 de la lista aprista, puesto destinado a un independiente.
Asimismo, para reemplazar a Del Castillo en el primer lugar de la nómina parlamentaria se propuso a Alfredo Barnechea, independiente muy ligado al partido de la estrella. Asimismo se mencionó a Susana Pinilla, ex ministra de la mujer y aunque no es militante, es una estrecha colaboradora del gobierno aprista.
Otro nombre sugerido en la discusión fue el de Carlos Roca, militante y dirigente aprista, cuya posición en los últimos días estuvo junto a Del Castillo y, finalmente, se voceó el nombre de Agustín Haya.
En los debates para encontrar una salida a la crisis interna se evaluó la fuerte crítica del presidente Alan García.
‘ESTRELLA’ NEGADA
El líder del partido dejó clara su crítica cuando señaló que siempre apostó que sea un aprista el candidato presidencial de su partido y que “no le hicieron caso”. Recalcó que no fue él quien propuso a Aráoz, sino que se trató de una decisión de la dirección política.
Cuando se le recordó que fue Aráoz quien declaró que fue él quien la convenció, García respondió categóricamente: “Yo jamás le dije, usted señora será candidata del Apra. Yo no soy dueño del Apra”, afirmó.
Dijo no comprender por qué Javier Velásquez Quesquén y los demás dirigentes no expresaron sus aspiraciones políticas, aunque se le recordó –en vano- que éste sí lanzó su precandidatura presidencial en su ciudad natal.
En su intento por quitar cuerpo del problema, García afirmó haber advertido a la dirigencia de su partido que era “difícil negociar con quien no es directamente compañero”.
AMIGOS VOTARON A DEL CASTILLO
García se abstuvo de opinar sobre la imposición de Del Castillo, sin embargo, cuando diario16 le preguntó si el triunfo de Del Castillo era un fracaso de la Dirección Política ante la militancia, respondió: “Hay que ver cuántos habrán votado. Porque si quiere usted yo también hago una votación de mis amigos internos, trabajadores de Palacio y salgo ganando”.
Admitió que le hubiera gustado ser el candidato presidencial del Apra, pero que no lo hizo porque ya está ejerciendo el cargo de Mandatario.
Les dedicó un mensaje a sus correligionarios: “Mi invocación es a los miles de apristas de corazón que votaron por mí, que tengan paciencia, tal vez este no es el momento, será más adelante…”
Con información del "Diario 16"
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