Los "indignados" del Movimiento 15-M salen hoy las calles de las principales ciudades españolas para pedir un cambio político y social, y reiterar su rechazo a los bancos y los gobiernos, a los que consideran los culpables de la crisis económica actual.
El gran objetivo es protestar contra el Pacto del Euro, que surgió de una reunión del Consejo Europeo celebrado el pasado 12 de marzo.
Los líderes de los 17 países de la zona euro aprobaron una serie de medidas para fomentar la competitividad y afrontar la crisis de la deuda.
Entre otros, piden compromisos sobre moderación salarial, flexibilidad laboral, contención del gasto en pensiones, prestaciones sociales y coordinación de políticas fiscales.
"Viene otro recorte brutal", dice Luis Fernández, de la asociación de desempleados Adesorg.
"Aquí es donde se ve el dominio de la banca sobre los países. Han vendido el país, ya no es de los españoles, es de la banca europea", acotó.
Más de 500 agentes antidisturbios controlarán que no haya altercados. El dispositivo será mayor en el entorno de la plaza de las Cortes. La Policía Nacional y las municipales tienen previsto actuar en colaboración en los tramos del recorrido que transcurra por localidades.
La policía establecerá un perímetro de seguridad que afectará a todos los accesos y calles adyacentes para que nadie pueda acercarse al Congreso de los Diputados.
El denominado grupo de “Los indignados” está conformado por miles españoles, en su mayoría jóvenes, que se reunieron durante varios días en la Plaza Sol de Madrid, así como en otras ciudades, para protestar pacíficamente contra la crisis económica y contra la inacción del gobierno por solucionarla.
El grupo permaneció varios días ocupando la Plaza Sol, mientras que en otras ciudades españolas también miles de jóvenes hicieron lo mismo.
Andina
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