domingo, 18 de abril de 2010

Incineran a cientos de fallecidos por sismo en China

By EFE
PEKIN
Cientos de fallecidos en el terremoto que azotó el pasado miércoles la provincia china de Qinghai, y que ha causado al menos 1,339 muertos, fueron incinerados el sábado, mientras los equipos de rescate continuaban sacando a gente de entre los escombros.

Las autoridades locales han decidido que los cadáveres sean enterrados o incinerados ``inmediata y adecuadamente'' para prevenir un posible brote de enfermedades en la zona afectada por el sismo de 7.1 grados en la escala de Richter.

"En lo que respecta a los cuerpos, debemos respetar a los fallecidos, las costumbres funerarias de las minorías étnicas y consolar a sus familiares de forma apropiada'', explicó el Departamento de Asuntos Civiles de Qinghai en un comunicado.

Más de 1,000 monjes budistas se reunieron en la ciudad de Jiegu, uno de los lugares más afectados, para rezar por las víctimas.

El portavoz del cuartel del servicio de emergencias, Xia Xueping, declaró que "unas 11,849 personas están heridas, de las cuales 1,297 se encuentran en estado grave'', y 332 permanecen desaparecidas.

Además, todavía hay mucha gente sepultada entre los escombros y miles de soldados, policías, bomberos y trabajadores médicos de todo el país han sido movilizados para participar en la misión de salvamento.

Mientras, muchos de los sobrevivientes del sismo pasaron una tercera noche a la intemperie o en tiendas de campaña desplegadas en el área y con temperaturas de tres grados bajo cero.

Los grupos de rescate también intentan hacer frente a las malas condiciones meteorológicas y a la falta de oxígeno, y al menos 200 personas pertenecientes a los equipos de salvamento han tenido que abandonar la misión por sufrir mal de altura.

Li Pengxin, funcionario encargado de la supervisión de las operaciones, aseguró que los trabajadores evacuados estaban gravemente enfermos. "Muchos sufrían vértigos, tenían dificultades para respirar y sus labios estaban amoratados, mientras que algunos soldados vomitaban continuamente e incluso escupían sangre'', indicó.

El pronóstico del tiempo indica que una nevada de corta duración caería durante la noche sobre las zonas afectadas por el terremoto.

Las autoridades en la zona esperan que el número de muertos aumente, ya que es muy difícil que los sobrevivientes que permanecen bajo los edificios derrumbados soporten el frío.
Con información de "El Nuevo Herald"

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