jueves, 14 de octubre de 2010

A 10 años del Bicentenario de la Bandera

Por: Crl EP (r) Tomás delgado A.
El 21 de Octubre del presente año los peruanos nos vestiremos de fiesta, al conmemorarse el centésimo nonagésimo aniversario (190 años) de la institucionalización de nuestra Bandera Nacional.

Día oportuno, para que el pueblo reflexione si aquel vació de sentimiento patrio existente al momento de la independencia y que tanta daño nos hizo en los momentos más trágicos de nuestra vida republicana, es ya un recuerdo que quedó atrás, o si continua como un sello maligno que nos persigue.

Día oportuno, para que tu, padre o madre reflexiones sobre cuanto de amor patrio has sembrado en tus hijos, para que tu maestro reflexiones si puedes mirar a tus alumnos y decir, yo los he hecho patriotas.

Día oportuno, para que nuestras autoridades en general reflexionen sobre el tiempo que no se detiene, sino que avanza y se acaba para aquella tarea que no estando escrita, en cualquier cargo público o privado, siempre será su primera e ineludible responsabilidad: el generar en su entorno ciudadanos con sólida identidad nacional, lo que empieza por amar a la patria y su Bandera.

Decimos primera responsabilidad, de padres, maestros y autoridades, en el sentido de que sin ese amor a la patria y la Bandera, no podemos pensar en una sólida identidad nacional, en un desarrollo y menos aún en el demandado bienestar general del pueblo peruano.

Día oportuno, para conversar con los hijos y hablarles del significado de la Bandera, de enseñarles que un buen peruano no hace uso y abuso de ella, que ella no es el trapo sucio que hay que lavar en una plaza como protesta eolítica, que no es el estandantarte de lucha en una marcha de protesta callejera, que no es un banderín cualquiera que se coloca en el frontis de la casa y se olvida hasta quedar sucio y hecho trizas.

Por el contrario, hay urgencia de enseñarles que es el sagrado emblema que nos representa como pueblo, al que debemos nuestra más solemne veneración y hasta la entrega de la vida por mantenerla siempre flameando libre de toda presión y orgullosa de sus hijos. Todo esto y más es nuestra Bandera, enseñanza sagrada que nos da sentido como Perú, que nos da sentido como pueblo y que nos da sentido de llamarnos peruanos; en ella esta cada rincón de la patria, sus recursos y por supuesto, todos y cada uno de nosotros, sus hijos.

Día oportuno, para que en familia presentes tu saludo a nuestra Bandera, asistiendo a su izamiento en la Plaza que lleva su nombre "Plaza a la Bandera" u otra, si ello no te es posible hazlo a través de un abrazo fraterno a otro peruano, o por medio de un canto o poesía aún en la soledad y la lejanía, y a fin de cuentas, eleva tu mirada al cielo dando gracias a Dios por haberte hecho peruano.

No dejemos que nuestra sociedad, nuestros hijos y nietos, lleguen al 21 de octubre del 2020, tan vacíos como ha estado gran parte de nuestra sociedad desde el momento de la independencia hasta nuestros días.

¡VIVA EL PERU!
Crl EP (r) Tomás delgado A.

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