El general Miguel Hidalgo Medina lleva un año y medio en la dirección general de la Policía Nacional y, en ese tiempo, no solo ha generado anticuerpos sino insatisfacciones entre los altos oficiales de su institución. Además, los pocos logros sobre seguridad ciudadana y la escasa detención de delincuentes y prófugos han hecho pensar en su posible relevo del cargo.
Así lo señalaron ayer oficiales y asesores del Ministerio del Interior con quienes este diario se reunió. Explicaron que sus más fuertes pasivos son el aumento de asaltos, asesinatos y violaciones durante su gestión, y el poco trabajo para capturar a José Enrique Crousillat, amén del escándalo del video saliendo de un hostal con una mujer a bordo de un vehículo policial.
Sobre este último punto surgió ayer la versión de que, en los próximos días, se filtrará el segundo video de Hidalgo en el que, supuestamente, aparece con otra oficial fuera de sus oficinas. Si esto se concreta, las cosas se complicarán para Hidalgo, más aún si se confirma que volvió a usar un auto oficial en estas actividades. El nombre voceado de la mujer responde a las iniciales J.M.A.
Toda la información acerca del director general está siendo suministrada al ministro Fernando Barrios, quien hasta hoy mantiene con él una buena relación de trabajo. Inclusive se les vio juntos en la última sesión de la CADE, en Urubamba, departamento de Cusco.
También se baraja la posibilidad de que Hidalgo sea relevado del cargo con todos los honores, pues es muy amigo del presidente Alan García, y enviado a una agregaduría policial, a fin de que tenga una suerte de asilo dorado y no le alcancen más las críticas a su gestión, así como las investigaciones abiertas en su contra seguidas en el Tribunal Militar Policial.
APARECE EL PRIMO DE NAVA
Para reemplazar a Hidalgo, siempre y cuando el presidente Alan García así lo decida, ya se vocea al actual jefe de Estado Mayor, general Walter Rivera Alva, como su reemplazo. Este oficial también goza de la confianza del jefe de Estado desde hace muchos años, lo cual hace verosímil que se convierta en el máximo jefe de la Policía.
Rivera Alva es primo político del secretario general de Palacio de Gobierno, Luis Nava Guibert, quien, según informaciones periodísticas, siempre le ha brindado apoyo durante su carrera en la institución.
Otro punto a favor de este general es que es amigo de Hidalgo y no abonaría en los cuestionamientos a su labor. Antes de llegar a ser jefe de Estado Mayor, Rivera ocupó la Dirección de Investigación Criminal y la Dirección de la Policía Fiscal, donde sus logros eran escasos.
El ascenso de este último oficial se dio también porque renunció a la Policía el general Arturo Dávila Vega por serias discrepancias con Hidalgo. Dávila fue el presidente de la comisión investigadora que concluyó que Hidalgo debía ser retirado de la Dirección General tras encontrarlo responsable del escándalo del primer video en el hotel Elíxir.
Sin embargo, su conclusión fue dejada de lado cuando el caso pasó al Tribunal Militar Policial, lo cual constituyó un ‘salvavidas’ para el general amigo del presidente.
Con información del "Diario 16"
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