Es una buena causa, de eso no hay duda, pero probablemente la artista Alice Newstead exageró un poco (por decir lo menos) en su cruzada medioambiental. La británica se colgó (literalmente) de dos enormes ganchos de metal para protestar contra la caza de tiburones. La dolorosa acción se llevó a cabo en Hong Kong. Como se sabe, en Japón se continúan asesinando a múltiples especies marinas, como ballenas, delfines o tiburones.
La iniciativa de Newstead, se enmarca dentro de una jornada de manifestaciones en defensa de los tiburones y ha contado con el apoyo de los organizadores de este evento, entre ellos el grupo ‘Protectores del tiburón’, quienes llevan a cabo una campaña mundial para proteger a estos animales.
Pero esta no es la primera vez que Newstead lleva a cabo su sangrienta protesta. Anteriormente ya se le había visto colgada de su propia piel.
Con su singular ‘performance’, la artista busca ejemplarizar la masacre que se comete contra los tiburones, a los que en algunos lugares se les cuelga de ganchos para cortarles las aletas y hacer sopa. Luego, se les tira aún vivos al mar, donde terminan muriendo.
Fuente. Elcomercio.pe
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